lunes, 7 de marzo de 2011

Presentación


Cuando tienes prisa o estás muy ocupado en la oficina y no dispones de mucho tiempo para comer ¿Qué es lo más práctico? Una torta.

Para esas pequeñas porciones del guisado del día anterior que no alcanzan ni para un plato, ¿En qué la aprovechas? En una torta.

¿Qué alimento te da la flexibilidad de ponerle todo lo necesario para que sea nutritivo y a la vez sencillo de comer? Una torta.

¿Qué era lo más recurrente en tu lunch escolar y en el de la mayoría de tus compañeros? Una torta.

O dime tú, estimado lector ¿A poco no se te antoja comerte una torta como la de la imagen de arriba, ahora mismo?

La torta se come en todo México. Y en todas partes las preparan y saben diferente. Esa es su mayor virtud y también defecto. Porque hay veces que las cosas no salen tan bien como esperabas y esa opción de comida que elegiste por rápida y práctica resulta todo un fiasco.

En este espacio buscaremos la torta perfecta. Pero... ¿De verdad existe la torta perfecta? Así es. Además de la que te preparaba tu mamá para ir a la escuela, existe la torta perfecta cuando estás hambriento. O cuando estás de antojo. O cuando te reúnes con tus amigos para ver el Súper Tazón o la final de futbol. O cuando no quieres cocinar algo complicado. Existe una torta perfecta para cada ocasión.

Para un aficionado de este tipo de comida "underground" (como el autor de este blog), la búsqueda por probar nuevos sabores y nuevas propuestas o estilos de prepararlas no tiene fin. Por eso estoy a dieta.

Me dedicaré a narrar únicamente mis experiencias en estos menesteres de comer tortas, sin pretender recomendar nada. Porque lo que a mi me pudo parecer extraordinario, para otros podría parecerles poco más que abominable. Ya saben: "En gustos y colores, no han escrito los autores."

¡Disfrútenlo!

No hay comentarios: